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La nota publicada esta tarde explica que unificar los colores de los tejidos y las estructuras de las prendas en la secundaria y la enseñanza media superior permitirá a la industria textil cubana un mayor aprovechamiento de los inventarios y capacidades de reposición.

Por otro lado, la nueva imagen se adecua a las demandas de los estudiantes con solo la transformación de cuatro estructuras, lo cual favorece que los procesos de moldes y escalados por tallas sean menos complejos, detalló el escrito.

La eliminación de los zíperes como accesorios de cierre y la utilización de los botones en su lugar, también resultan otras de las facilidades del venidero vestuario escolar, lo cual resultará más viable para su reparación y reposición.

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