La Habana, Cuba. – Los Juegos Olímpicos de Tokio fueron protagonistas en la agenda del actual año, y Cuba obtuvo un muy buen resultado con su delegación más pequeña de las últimas décadas.
Siete medallas de oro, 3 de plata y 5 de bronce llegaron al botín. El boxeo repitió como puntal mediante los cetros de Andy Cruz, Julio César la Cruz, Arlen López y Roniel Iglesias.
La lucha grecorromana estuvo de fiesta, Luis Orta se proclamó campeón y Mijaín López ganó su cuarto oro olímpico. De manera espectacular también se llenaron de gloria los canoístas Serguey Torres y Fernando Dayán Jorge. Lograron platas la judoca Idalys Ortiz, el saltador Juan Miguel Hechevarría y el tirador Leuris Pupo.
Los bronces cubanos fueron a los pechos de la discóbola Yaimé Pérez, el saltador Maykel Massó, el taekwandoca Rafael Alba, el boxeador Lázaro Álvarez y el luchador Reineris Salas.
Entre el máximo nivel
El otro título mundial llegó en la cita de Relevos de Atletismo, gracias a Zurian Hechavarría, Rose Mary Almanza, Lisneidy Veitía y Roxana Gómez en el 4 por 400 metros.
Sólo 2 medallas más gozó la Mayor Nación de las Antillas, el canotaje aportó los bronces de las duplas Yarisleidis Cirilo-Katheryn Nuevo y Serguey Torres-Fernando Dayán Jorge.
El judo vivió su peor Campeonato Mundial del actual siglo, la mejor nota resultó el quinto lugar de Idalys Ortiz a pesar de sufrir la Covid-19 pocas semanas antes.
Otras huellas mundiales
Lisandra Ordaz y Yasser Quesada avanzaron entre los 32 mejores en la justa de ajedrez, donde en la versión para personas con discapacidad se logró bronce por equipos y el sexto lugar de Carlos Larduet. En la Copa de Frontón de 30 metros lo mejor resultó el cuarto puesto de Yasmary Medina y Daniela Darriba.
En la cita de natación en piscina de curso corto destacaron los dos récords nacionales de Andrea Becali y uno de Elisbet Gámez. Cuba debutó en un Mundial de parapente y Gerardo Ramos logró el escaño 26.
Y en la primera edición de los Panamericanos Juveniles el país mostró buen potencial.