Río de Janeiro, Brasil.Avivar las brasas de su fuego de intenciones, será la misión de la delegación cubana que incursionará desde el siete de septiembre en los Juegos Paralímpicos. Será Río de Janeiro el escenario escogido para que 20 deportistas de esta Isla ratifiquen que el corazón y el talento, pueden forjar medallas.

En cinco disciplinas cifrará la Mayor de las Antillas sus aspiraciones, siendo nuevamente la pista de atletismo nuestro paraíso de ilusión. Allí irrumpirán con sus mejores códigos competitivos, Omara Durand y Yunidis Castillo, cuya dignidad y talento podrían ser estocadas para sus  rivales.

Su poder de aceleración contagiarían de optimismo a un grupo de atletas, que están convencidos de que sus proezas serán aplaudidas en casa.

Mucho corazón

El camino al éxito en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro, estará plagado de rivales palpitantes y enérgicos. Por eso, la comitiva cubana presente en CINCO deportes, está lista para explotar sus virtudes en cuanto los adversarios les dejen una rendija.

Es cierto que el atletismo será nuevamente escudo y adarga, sin embargo la natación, el judo, el levantamiento de pesas, y el tenis de mesa en silla de ruedas, serán fieles y efectivos escuderos.

La calidad del movimiento paralímpico cubano se conoce de memoria, cualquier rival al que se enfrente conocerá de la intensidad de su alma competitiva. Nuevas gestas ansían por perpetuar en Río de Janeiro los atletas cubanos. Sus armas son varias, sin embargo la más poderosa la atesoran en su pecho y se llama corazón.