La Habana, Cuba. – En medio de un apagón, el teatro del Museo Nacional de Bellas Artes se iluminó con las voces de cantoras iberoamericanas que participaron en el festival internacional Cantoras Ella y yo.
A pesar de la falta de electricidad, guitarras y voces resonaron reafirmando que la música une a los pueblos, figuras como Heidy Igualada, Anabel López, el trío Palabras y Annie Garcés mantuvieron viva la trova, y tras el regreso del fluido eléctrico, La Maza de Silvio Rodríguez selló el momento con emoción renovada.
El evento también celebró los 25 años del proyecto Canto de Todos, fundado por Vicente Feliú, como espacio de encuentro entre creadores de distintas naciones.
La noche, marcada por la contingencia energética, se convirtió en un canto a la resistencia cultural, donde mujeres trovadoras reafirmaron su compromiso con el arte y la memoria compartida de Iberoamérica.