La Habana, Cuba. – No fue hasta que empezó a hacer su tesis en la carrera de Matemática-Cibernética que Carlos Blanco se percató de que había varios sitios de consulta en la web a los que np tenía acceso.

El mensaje en pantalla era más que claro: este sitio no está disponible para su país, algo que ya había visto en otras plataformas como eBay, pero que se sorprendió al encontrarlo en páginas tecnológicas de primera línea y reconocidas a nivel global.

Esa consecuencia, tal vez menos conocida del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, había sido denunciada antes por la Universidad de Ciencias Informáticas, cuando en 2018 presentaron un informe con un total de 116 sitios web públicos, pero bloqueados para las direcciones IP de esa institución.

Una situación que afecta a cientos de futuros profesionales y cuyo objetivo es, precisamente, limitar y frenar el desarrollo tecnológico de la Isla.