Cinco mil universitarios observados durante más de 40 años proporcionaron pruebas de que los más pesimistas tendieron a morir más jóvenes. giron.cu

Cinco mil universitarios observados durante más de 40 años proporcionaron pruebas de que los más pesimistas tendieron a morir más jóvenes. giron.cu

Washington, Estados Unidos.- Una revisión de más de 160 estudios científicos que abordan la conexión entre el estado positivo de la mente y la longevidad ha hallado pruebas claras y convincentes de que las personas más felices tienden a tener mejor salud y a una existencia más prolongada.

El estudio, efectuado por científicos de Estados Unidos, se centró en ocho tipos de investigaciones diferentes a largo plazo, así como en análisis experimentales, tanto en poblaciones humanas como animales.

Las pruebas que relacionan una perspectiva positiva de la vida con la longevidad fueron más contundentes incluso que las que vinculan la obesidad con un descenso en la esperanza de vida, según el informe de los expertos.

“Fue casi chocante, y ciertamente nos sorprendió, ver la consistencia de los datos”, ha afirmado Ed Diener, profesor emérito de psicología de la Universidad de Illinois, quien dirigió el estudio.

Riesgo para los pesimistas

Cinco mil universitarios observados durante más de 40 años proporcionaron pruebas de que los más pesimistas tendieron a morir más jóvenes. Y en el laboratorio, los científicos vieron que los comportamientos vinculados al optimismo redujeron las hormonas relacionadas con el estrés, incrementaron la función inmunológica y ayudaron a recuperar al corazón tras un esfuerzo excesivo.

En experimentos con animales también constataron que los que estaban en una situación de estrés, como en jaulas repletas de animales, tuvieron sistemas inmunológicos más débiles y murieron más jóvenes que los que no vivían hacinados.

Los expertos señalaron que aunque las políticas sanitarias actuales se centran en combatir la obesidad, el tabaquismo, los malos hábitos alimenticios y la falta de ejercicio, “puede ser el momento de sumar el “sé feliz” y evitar el enfado crónico y la depresión”.