La Habana, Cuba. – El Cuartel Moncada de Santiago de Cuba, con más de 100 años de creado, fue una de las más importantes fortalezas del país desde la etapa colonial y hoy es verdadero símbolo de esa urbe oriental.
En el año 1859, Manuel de Ciria, conocido también como el Marqués de Villaitre, designó al brigadier Carlos de Vargas para que iniciara las obras de edificación y en esa época se le conoció como Cuartel Reina Mercedes, en honor a la esposa del rey Alfonso XIII, que llevaba ese nombre.
Durante la guerra hispano-cubano-americana albergó a las tropas invasoras y tenía como misión la defensa de Santiago de Cuba. Muchos cubanos estuvieron presos en ese lugar, entre ellos, el patriota Guillermo Moncada.
26 de julio, Día de la Rebeldía Nacional
El 17 de julio de 1898, el gobernador español de Santiago de Cuba se rindió ante las tropas invasoras que ocupaban el Cuartel Reina Mercedes. Nueve años después, esa fortaleza tomó el nombre del Mayor General Guillermo Moncada.
En el año del Centenario del Apóstol, un grupo de revolucionarios, dirigidos por el joven abogado, Fidel Castro, atacó el cuartel Moncada, el 26 de julio del 53.
Aunque la acción no tuvo éxito, sí condujo a que, con el apoyo del pueblo, el primer día de enero del 59 la fortaleza se rindiera ante el empuje de los rebeldes, encabezados por el Comandante Raúl Castro.
El 26 de julio del 59, en una reunión del Consejo de Ministros, se acordó declarar esa fecha como el Día de la Rebeldía Nacional.
Las armas no son más poderosas que las ideas
En el acto efectuado el 26 de julio de 2002, en Ciego de Ávila, 49 años después del asalto al Cuartel Moncada, el Comandante en Jefe, Fidel Castro, trató temas vigentes cuando dijo: «La historia ha probado que nada ha podido derrotar a nuestro pueblo en sus nobles afanes de lucha, y que las armas físicas no son más poderosas que las ideas».
Fidel destacó, además: «reina el pensamiento de Martí en el pueblo de trabajadores que somos hoy, y nada pudo tampoco impedir que del espíritu proletario de un país, que fue construido durante siglos con sangre y sudor de esclavos y obreros, brotaran con fuerza inextinguible y para siempre el ansia más plena de libertad y toda la justicia que demandó nuestro Héroe Nacional«.