La Habana, Cuba. – Desde las constituciones de los próceres por la independencia hasta la actualidad, Cuba trazó su rumbo de soberanía y justicia sobre la base del respeto a los derechos y garantías, que en los tiempos actuales se perfeccionan continuamente, a tono con los cambios y transformaciones que experimenta nuestra sociedad, bajo el precepto de otras constituciones devenidas en la Isla, y en especial, la de Guáimaro, nacida el 10 de abril de 1869, y considerada la primera Ley suprema revolucionaria, de la cual Fidel Castro expresó que «consagró definitivamente el derecho a la libertad de todos los cubanos».

Teniendo en cuenta estos antecedentes y otros incorporados a lo largo del proceso revolucionario, en los últimos años resulta una prioridad del estado cubano fortalecer la institucionalidad, en pos de lograr una sociedad cada vez más inclusiva, justa y participativa.

En el camino hacia el perfeccionamiento de la democracia socialista

Nuevas normativas y proyectos de leyes introducidos en Cuba en los últimos años, llevados al seno del Parlamento para su debate y discusión, a fin de canalizar dudas y modificar cuestiones legales en pos de mejorar su comprensión y alcance, sometidos después a su aprobación en los períodos ordinarios de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, continúan trazando el camino hacia el perfeccionamiento de la democracia socialista.

Un ejemplo de ello lo constituye la discusión a nivel comunitario, desde el 1ro de febrero y hasta el 30 de abril, del proyecto de Ley del Código de las Familias, el cual luego de ser enriquecido y modificado en cuestiones puntuales a partir de los criterios y opiniones del pueblo, retornará al Parlamento cubano como último paso, y pueda definirse la fecha para el referendo popular.