La Habana, Cuba. – No deja de ser sorprendente la constante afluencia de público a la Feria Internacional del Libro, en medio de las estrecheces económicas que vive la nación.
Este es el evento cultural más masivo del país, afirma a Radio Reloj el ministro de Cultura, Alpidio Alonso, quien no esconde el orgullo que sienten los organizadores al ver que las familias siguen llegando a la fortaleza de San Carlos de La Cabaña para comprar libros o simplemente pasear por ese hermoso lugar.
Por eso, Alonso Grau es categórico al reiterar la voluntad política del gobierno para mantener los eventos culturales, a pesar de las actuales dificultades económicas.
Particularmente se la ha dado un apoyo a esta Feria por el significado extraordinario que tiene, subraya. Y ese apoyo ha permitido incluso mantener precios asequibles para los libros de las editoriales cubanas.
Espacio de confluencias
El titular de Cultura, Alpidio Alonso, consideró que la Feria Internacional del Libro constituye un momento de encuentro con la cultura latinoamericana y particularmente con la literatura de nuestros pueblos.
Regocija ver cómo sigue siendo ese espacio al que siguen viniendo importantes intelectuales de nuestro continente y de otras partes del mundo, subrayó Alonso.
El ministro se refirió nuevamente al atractivo que tiene entre las familias cubanas la principal cita editorial del país, que, dijo, también sigue convocando a miles de personas no solo en La Habana, sino en las instalaciones que se abren en todo el país al paso del evento literario.
Estamos haciendo la feria y vamos a seguir haciéndola porque es una fiesta de nuestra cultura, subrayó con énfasis el ministro de Cultura.