La Habana, Cuba. – Los Estados Unidos tienen la capacidad de impedir la presencia de Cuba en Los Ángeles, pero no tienen el poder de callar nuestra voz, ni de silenciar la verdad, sentenció el Primer Secretario del Partido y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Ante representantes de la sociedad civil cubana excluidos de la Cumbre de las Américas, resaltó queallí no se discutirá nada sobre la desigualdad económica y social de la región.
Díaz-Canel añadió que tampoco se profundizará en problemas como el cambio climático y los perjuicios por la pandemia; en los documentos a aprobar, dijo, no habrá pronunciamiento alguno contra las medidas económicas coercitivas y no se ratificará en ellos el reclamo a que se ponga fin al bloqueo.
Significó que es en la Cumbre de los Pueblos, verdadero evento político trascendental, donde lamentamos no poder participar, pues allí los cubanos hubieran aportado valiosas ideas.
Discriminatoria participación
En su mensaje a los representantes de la sociedad civil cubana excluidos de la llamada Cumbre de las Américas, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel señaló que el gobierno estadounidense convocó a dicha cita con participación discriminatoria e insuficiente representación regional.
En el caso de nuestro país, la exclusión no solo fue contra el gobierno, sino también contra los representantes de la sociedad civil y los actores sociales, incluidos los jóvenes, sostuvo.
Díaz-Canel apuntó que: los Estados Unidos no se conforman con determinar quién y cómo debe ser el gobierno cubano, ahora se proponen definir quiénes son los representantes de la sociedad civil y que actores sociales son legítimos.
Recordó que en 2015, en la Cumbre realizada en Panamá, el General de Ejército, Raúl Castro, dejó sentado los principios que garantizarían una relación más fértil entre las dos Américas.
Prepotencia imperial
Al comentar los antecedentes en la historia entre políticas injerencistas y soberanas, el presidente de la República Miguel Díaz-Canel rememoró que cuando el gobierno estadounidense convocó la primera Cumbre de las Américas, y excluyó a Cuba, Fidel resumió la esencia de la prepotencia imperial.
Desde ese entonces, contra esta América Latina que llama las cosas por su nombre y no pide permiso para ejercer sus derechos soberanos se elaboró la lista de los excluidos, la cual nos honra encabezar junto a Venezuela y Nicaragua, dijo el mandatario cubano.
En su mensaje a los representantes de la sociedad civil cubana excluidos de la llamada Cumbre de las Américas, Díaz-Canel agradeció la gallardía y firme posición asumida por numerosos líderes de la región que han rechazado enfáticamente las exclusiones.
Cambió Cuba, cambió nuestra América, pero el imperio no cambia, sentenció el Primer Secretario del Partido.
Cuba tiene memoria
Es un error y un acto de desprecio suponer que nuestros pueblos no tienen memoria, dijo el presidente Miguel Díaz-Canel al señalar el historial de involucramiento y contubernio de las administraciones estadounidenses con los regímenes más sangrientos que ha conocido este continente.
Puso de ejemplo cómo el sistema político estadounidense permite financiar las campañas electorales y comprar gobernantes, mientras restringe el derecho al voto a electores de los sectores más populares.
En sus palabras ante la sociedad civil excluida de la Cumbre de las Américas en Estados Unidos, Díaz-Canel denunció que la democracia y los derechos humanos son sólo quimeras en esa potencia.
Argumentó cómo en el país más poderoso del mundo no se aseguran servicios esenciales de salud, y el interés de los productores y comercializadores de armas tiene prioridad sobre la vida de los niños.