La Gaceta Oficial Ordinaria número 96 publica el texto, donde se dispone que el nuevo centro será un Organismo de la Administración Central del Estado, y se extingue el Instituto Cubano de Radio y Televisión.

Esa institución tiene entre sus funciones proponer el perfeccionamiento de la Política de la Comunicación Social, así como contribuir a fomentar la cultura del diálogo y el consenso en la sociedad cubana.

La creación de ese organismo y extinción del ICRT tributan a la ausencia, hasta el momento, de un centro que conduzca y controle el sistema de comunicación social para fortalecer la institucionalidad del país.