Pinar del Río, Cuba. – Protagonistas de las más disparatadas e hilarantes historias, con su trabajo cotidiano los pinareños han borrado una inmerecida fama de descuidados.

Hoy, esa apreciación queda para los chistes que forman parte del acervo humorístico de los cubanos, tan dados a la guasa y al relajo. Lo cierto es que Pinar del Río, a fuerza de trabajo y constancia, ha dejado de ser La Cenicienta y está a punto de organizar por tercera vez el acto central por el 26 de Julio.

Un somero vistazo a la provincia permite apreciar la incesante actividad que se despliega en prácticamente todos los sectores.

Desde actividades tradicionales como la cosecha de tabaco o la minería, hasta un pujante sector turístico que desborda a Viñales, Pinar del Río hace un esfuerzo ingente por mejorar la economía local, que en definitiva es mejorar la vida de la gente.

Provincia en desarrollo

Hay avances en importantes indicadores asociados a los programas de salud y educación en los 11 municipios de Pinar del Río, donde casi un millar de familias se beneficiaron con subsidios para adquirir materiales de construcción.

La ejecución del presupuesto provincial del pasado año cerró con un superávit y ese territorio estuvo entre los que más recaudó por concepto de Contribución territorial.

En general, en medio de las estrecheces económicas que vive el país, la provincia exhibe resultados favorables gracias a una mayor eficiencia en el cumplimiento de los planes.

El gobierno local, cuyo funcionamiento y gestión son loables, ha tenido un buen desempeño en función de la solución de los problemas y en el propósito de alcanzar un desarrollo superior, un camino que transitan para hacer hoy un verdadero cuento de pinareños.