El mapa político español vuelve a ser tan complejo como seis meses atrás. Foto: cubadebate

El mapa político español vuelve a ser tan complejo como seis meses atrás. Foto: cubadebate

Madrid, España.- Todo hace pensar que si España finalmente quiere integrar gobierno luego de dos vueltas de elecciones legislativas, ello radicará mucho en la voluntad de concertación que en lo adelante demuestren los líderes de sus principales fuerzas políticas.

En efecto, la segunda ronda para intentar establecer una administración nacional, realizada en días pasados, no se diferencia sustancialmente en sus resultados de la ejecutada en diciembre pasado, que llevó a un largo proceso de conversaciones y tratativas sin salida alguna.

Entonces el rey Felipe VI entregó la tarea de integrar el poder ejecutivo a Pedro Sánchez, líder del Partido Socialista Obrero Español, PSOE, quien nada pudo hacer por la institucionalidad local.

Lo acontecido

Transcurridos seis meses sin gobierno, los recientes resultados en las urnas españolas no difieren en mucho con respecto a los de diciembre pasado, y vuelve a repetirse el hecho de que ninguno de los partidos contedientes suma los 176 escaños necesarios para poder encabezar una administración por sí mismo.

Según cifras finales, el Partido Popular, de derecha, y su líder Mariano Rajoy, se adjudicaron la mayoría de los sufragios. Mientras, el PSOE se mantuvo como segunda fuerza nacional, seguida en ese orden por la colación Unidos Podemos, y Ciudadanos, de centroderecha.

En pocas palabras, que la vuelta al intento de trazar alianzas y compromisos es un hecho para las próximas jornadas, ahora con una derecha con mayoría parlamentaria simple e ínfulas renovadas de poder.

Otro gran embrollo

En consecuencia, el mapa político español vuelve a ser tan complejo como seis meses atrás. Por lo pronto, es descartable que el Partido Popular y el Partido Socialista Obrero Español se entiendan, toda vez que – si no hay cambios imprevistos- el partido de Pedro Suárez debe mantener su línea de no apoyar  a  la derecha en el ejecutivo.

Por demás, vale recordar que en los últimos días los líderes de Unidos Podemos, aún cuando los estudios de opinión les daban un nuevo margen de victoria finalmente no cumplido, han insistido en intentar arreglos con la izquierda menos radical para evitar otro angustioso vacío de poder.

Por su parte, Ciudadanos, admite la posibilidad de lograr cualquier trato satisfactorio, ya sea con el Partido Popular o con las entidades opositoras. Ahora, a esperar que pasa.