La Habana, Cuba. – La Asamblea Nacional se reúne mañana en una trascendente sesión extraordinaria. Esa reunión parlamentaria, la primera de este año, tendrá la responsabilidad de proclamar la nueva Constitución, nacida tras un amplio proceso de consulta popular.

Será esa la segunda Carta Magna del último medio siglo cubano, una etapa marcada por los intentos de llevar adelante un modelo autóctono a contrapelo de la histórica hostilidad de Estados Unidos.

A pesar de vivir casi en constantes atrincheramientos, en seis décadas, el país ha recorrido el camino de la institucionalidad siempre adaptando la legislación a la vida cotidiana, como se comenzó a hacer hace 60  años con la primera Ley Fundamental del gobierno revolucionario que en un curso natural nos ha traído hasta la nueva Constitución, un texto moderno y con raíces en la cotidianidad.

Y también la economía

Después de la sesión extraordinaria de mañana, durante jueves y viernes trabajarán las Comisiones Permanentes del parlamento para llegar al sábado con otro cónclave extraordinario que abordará la marcha de la economía y de la implementación de los Lineamientos.

Esos son dos asuntos también trascendentes porque no es un secreto para nadie el apremio económico que vive la nación, un momento complejo, agravado por el recrudecimiento de la hostilidad de nuestro vecino del Norte.

Llevar al parlamento la economía, cuando apenas a transcurrido el primer trimestre, indica la atención que pone en ese tema la máxima dirección del país. Es como llevar a punta de lápiz todo lo que sucede para evitar sorpresas desagradables en estos tiempos en que cada centavo importa, y en ese empeño también los legisladores cuentan.