La Habana, Cuba. – Cuando el miércoles venidero se constituya la Décima Legislatura del Parlamento cubano, los 470 diputados tendrán ante sí una tarea esencial: relanzar la economía.

Incrementar el protagonismo de la empresa estatal socialista, dinamizar la producción de alimentos, bajar los precios y controlar la inflación son tareas que ocuparán la atención de la legislatura, encomienda que no resulta fácil y que reclama de inteligencia colectiva, algo que sobra entre esos representantes electos en las urnas por el pueblo, quien pese a las campañas difamatorias no se dejó confundir y apostó por la Revolución y el Socialismo.

El mismo pueblo que hace 62 años derrotó de forma contundente la invasión mercenaria por Playa Girón; tarea que ahora de nuevo intentan los cipayos contemporáneos con el propósito de regresar la rueda de la historia, algo que en Cuba no sucederá.