La Habana, Cuba. – Se cumplen 110 años de la llegada de las cenizas de Félix Varela a Cuba y 233 de su natalicio.

El Padre Varela, como se conocía popularmente a Félix Varela, fue un erudito y un hombre de inteligencia excepcional que lo prueba su consagración al sacerdocio, magisterio, la escritura, filosofía, y la política.

A sus discípulos les inculcó el amor y la entrega a la Patria. Para Félix Varela Cuba era una obsesión, por ella meditaba, y ansiaba para ella el mayor bien posible.

Fue renovador de la enseñanza en la Isla, sus concepciones en la pedagogía abrieron un sendero esencial en el país. Enseñó a sus discípulos a razonar, a pensar y decidir por ellos mismos. José de la Luz y Caballero, maestro y discípulo de Varela afirmó: Mientras se piense en la Isla de Cuba, se pensará en el que nos enseñó primero en pensar.