Los sectores progresistas de América Latina y el Caribe podrían tener una muy buena noticia en octubre próximo si finalmente el veterano y experimentado líder popular Luís Ignacio Lula Da Silva retorna triunfante a la presidencia de Brasil.

Hay que decir que desde que se manejó la idea de su candidatura, y luego de eximido de todos los pretendidos delitos por lo que injustamente llegó incluso a guardar prisión, Lula encabeza la preferencia del electorado brasileño.

Así, una muy reciente indagación, a cargo de la consultora local Datafolia, acaba de afirmar que el aspirante por el Partido de los Trabajadores acumula 47 por ciento de la intención de voto  frente a un estático 27 por ciento de su contrincante, el actual mandatario y notorio derechista Jair Bolsonaro.

En pocas palabras, que Lula crece en votos.

Coherencia y compromiso

Sin dudas Luís Ignacio Lula da Silva es un oponente fuerte para el continuista Jair Bolsonaro.

Frente al caos nacional instaurado bajo el gobierno de derecha, Lula acaba de presentar un plan de gobierno que abre nuevamente enormes expectativas entre los brasileños.

Así, el aspirante popular asegura que con su gobierno terminará la irresponsabilidad oficial instaurada por el actual mandatario, así como la entrega indiscriminada de la riqueza y los recursos nacionales a grupos oligárquicos internos y extranjeros.

Se retomará la lucha contra el hambre, por la educación y salud para todos, por el trabajo y la seguridad social, el derecho a la tierra, el reconocimiento de las prerrogativas de los indígenas, y la integración latinoamericana.