Compartir

La Habana, Cuba.- El acto contra el bloqueo celebrado el sábado en un teatro de Manhattan, en Nueva York, constituye la muestra más reciente de la oposición mundial al criminal cerco estadounidense.

El encuentro fue el colofón de cinco días de intervenciones en la apertura del período de sesiones 80 de la Asamblea General de la ONU, durante los cuales la demanda de levantamiento del bloqueo ocupó espacio en las intervenciones de decenas de jefes de Estado y de Gobierno que usaron de la palabra.

Junto con la exigencia del cese de la masacre israelí en Gaza y el reconocimiento a Palestina como Estado, la condena a la política de asfixia a Cuba constituyó una de las posiciones reiteradas.

Ello adelanta el inmenso y seguro rechazo que volverá a recibir esa política estadounidense en la Asamblea, cuando se debata la resolución cubana que exige su fin, los días 28 y 29 de octubre.

Genocidio y Resistencia

El bloqueo es extraterritorial porque castiga a terceros para que cesen todo vínculo con Cuba, violando su soberanía. Pero hace tiempo está al descubierto la sucia estrategia que mueve la madeja de legislaciones que lo conforman.

Desde los años de 1960, como han revelado documentos desclasificados, el bloqueo busca un cambio de gobierno en Cuba mediante la presión sin límites a su población, para que lo geste.

Más que por su costo en dólares, los cubanos conocemos el peso de ese intento de asfixia total de más de 60 años, por el impacto que tiene en nuestras vidas; es la causa fundamental agazapada detrás de nuestras dificultades.

Ese carácter genocida es denunciado cada vez con más fuerza por la comunidad internacional, sabedora de que la frustración de los planes imperiales descansa en la resistencia de un pueblo que no se doblega ante las presiones.

Etiquetas: - - -