La Habana, Cuba. – Según la Organización Mundial de la Salud, el tabaco es la primera causa de muerte prematura en el mundo; por la importancia del tema nuestra sección hoy retoma un mensaje: No fumar es la única opción.
El doctor Alberto Quirantes, Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Salvador Allende, afirma que la adicción al cigarro está directamente relacionada con la aparición de una veintena de enfermedades, de las cuales 10 son diferentes tipos de cáncer.
Subraya el Profesor Consultante que también fumar es responsable del 90 por ciento de las muertes por cáncer de pulmón.
«Los hijos adolescentes de adictos al tabaco tienen más probabilidades de probar los cigarrillos y convertirse en fumadores, agrega el doctor Quirantes, quien recalca que mientras más años se encuentre un niño junto a padres con esa adicción mayores son las posibilidades de probar la sustancia«.
Guiar con el ejemplo
El doctor Alberto Quirantes subraya que es difícil educar y convencer a los hijos de los daños del tabaco y los peligros de fumar, si uno o ambos padres son adictos al cigarro.
«Pero el mal se puede revertir, asegura el Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Salvador Allende, pues los niños también pueden aprender de un progenitor adicto al tabaco cómo es posible dejar de fumar si desarraiga su vicio pensando en la salud de sus hijos«.
Y agrega: «Todo producto comercializado por la industria del humo está adulterado con sustancias químicas con el fin de aportarles propiedades como la de ser más adictivo o mejorar su sabor«, sostiene el también Profesor Consultante.
Las industrias tabacaleras agregan de esa manera aditivos capaces de aumentar la toxicidad que de por sí ya tiene el tabaco, tanto para fumadores activos como pasivos.