La Habana, Cuba.- Contenida en las hojas del tabaco está la nicotina, que es una droga. Cuando la inhalas, va directamente a tus pulmones y a la sangre.

En siete segundos una cuarta parte de la nicotina ha llegado al cerebro, por la arteria pulmonar.

Es una droga psicoactiva y un potente reforzador conductual, capaz de producir severa adicción química.

En cantidades bajas, la nicotina es un engañoso psicoestimulante, que “entretiene” y parece mejorar tu concentración en el trabajo o el estudio, y ese es uno de los principales factores de adicción al tabaco.

En dosis altas, actúa como depresor del sistema nervioso, y parece sedarte, cuando en realidad te vuelve adicto. Un cigarro de un gramo contiene de diez a veinte miligramos de nicotina, y la décima parte de ella pasa al humo que penetra en tus pulmones.

No fumigues tus pulmones

Para que tengas una idea de cuánto daño causa el tabaco, te contamos que la nicotina se utiliza en muchos países para fabricar insecticidas.

Ese alcaloide resulta un potente veneno para fumigar los invernaderos, y librarlos de insectos. La nicotina es un compuesto orgánico que constituye cerca del cinco por ciento del peso de la planta de tabaco, y se deposita mayormente en las hojas, en forma de sales de ácidos orgánicos.

Esa sustancia debe su nombre a Jean Nicot, quien introdujo el tabaco en Francia en 1560. Para que tenga una idea mejor, un fumador promedio inhala 0.8 miligramos de nicotina por cada cigarrillo.

Lleve esa cifra a gran escala, es decir, cajetillas por día, meses y años, y sabrá cuánta destrucción causa a sus pulmones, cerebro y a su salud en general.