La Habana, Cuba. – La XIII Bienal de La Habana ya echó andar, cuando el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam dejó abiertas las propuestas -sugerentes, reflexivas y cuestionadoras- de artistas allí convocados como parte del núcleo central del evento.

En el patio del inmueble, la salvadoreña Alexia Miranda instaló lo que llama «Medusas», una alegoría sobre la necesidad de restaurar el tejido social, con carácter interactivo, pues en su realización intervinieron muchas manos.

Grandes composiciones a base de textiles propone el maliense Abdoulaye Konaté, quien el lunes será investido como Doctor Honoris Causa por la Universidad de las Artes, en tanto el uruguayo Fernando Foglino cuestiona los monumentos públicos.

La cubana Tamara Campo trae una instalación interactiva a partir de telas blancas y el artista austriaco Clemens Kraus…se transforma en sicoanalista, en un singular performance.