La Habana, Cuba.- Por ser fieles amigos de los niños y defensores de sus derechos, la Organización de Pioneros José Martí envió reconocimientos a Fidel y a Raúl Castro.

En la clausura de la Asamblea Nacional Pioneril, ambos obsequios fueron entregados a la miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Olga Lidia Tapia Iglesias. Para Fidel, la figura de una pionera de la etapa Moncadista, y a Raúl, una bandera cubana en acrílico, ambas piezas del artista Lázaro Valdés.

Durante la jornada, Tapia Iglesias ratificó la confianza de la Revolución en los niños cubanos, y aseguró que son ellos el presente y porvenir de la Patria.

Reconocimientos hubo también para moncadistas y expedicionarios del yate Granma presentes en la Asamblea Pioneril, a la que asistieron el Comandante de la Revolución Guillermo García Frías y los héroes Ramón Labañino y Antonio Guerrero.

Compromiso joven

Una disertación sobre la historia de Cuba y la necesidad de su conocimiento y aprendizaje desde la comunidad, ofreció el Comandante de la Revolución, Guillermo García Frías, en la Asamblea Nacional Aniversario 55 de la Organización de Pioneros José Martí.

En las palabras conclusivas de la cita, en el capitalino Palacio de Convenciones, la primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas, Susely Morfa González, significó que no existen dudas, Cuba tiene los mejores niños del mundo.

Aludió al momento tan especial en que transcurrió la Asamblea Pioneril, poco después del VII Congreso del Partido Comunista de Cuba y cuando tiene lugar en la sociedad un amplio debate de dos de sus principales documentos.

La declaración final del encuentro ratifica el compromiso de la más joven generación con el presente y futuro de la Patria, como continuadora de la obra revolucionaria.

A conquistar el futuro

En la plenaria de la Asamblea Nacional Pioneril, la delegada por la central provincia de Ciego de Ávila, Maydelín Vázquez, afirmó que resulta imprescindible el conocimiento de la historia, las raíces y cultura del país, como eslabón esencial de la obra revolucionaria.

Tomemos el futuro, que es nuestro, aseveró emocionada la Cecilia de la Caridad Castelló, de la oriental provincia de Granma, quien agradeció a la Revolución por permitirle -cuando tenía solo dos años- salir airosa de severos daños en su sistema digestivo, gracias a la labor consagrada de los médicos del país.

Liet Jesús Rodríguez, de La Habana, se refirió a la orientación vocacional, la que -dijo- es fundamental en la formación de los futuros profesionales.

Concluida la Asamblea Nacional Pioneril, corresponde a partir de septiembre llevar sus planteamientos y acuerdos a las aulas, en aras de una organización más renovada, creativa y funcional.