Colaboración médica de Cuba llega a los más necesitados

La Habana, Cuba. – Aunque a muchos les duela y otros no la comprendan, la actitud de Cuba en medio de la pandemia del nuevo coronavirus solo tiene un nombre: Solidaridad.

Pero esa solidaridad, entendida como ayudar al que lo necesita, es una larga tradición asentada en la idiosincrasia nacional, en especial con la llegada al poder de la Revolución. Cuando el gobierno revolucionario apenas consolidaba su autoridad, en mayo de 1963, medio centenar de profesionales de la salud volaban hasta Argel en un viejo avión Britannia.

Ese fue el paso inicial de un programa que hoy involucra a casi 29 mil cooperantes de la salud que laboran en  59 países.

Epidemias, terremotos, huracanes…en fin catástrofes de todo tipo, en los cinco continentes, han movilizado desinteresadamente a miles de cubanos.

Dispuesto a ayudar

La actuación de Cuba ante la pandemia del nuevo coronavirus demuestra la solidez de un sistema sanitario que es capaz de contener los riegos al tender la mano a un millar de personas, algunas de ellas contagiadas.

Pero que nadie se asombre: hay 400 profesionales de la salud alistándose para ir a los países que han solicitado la ayuda cubana y la industria biofarmacéutica está dispuesta a cubrir las necesidades de Interferón planteadas por unas 15 naciones.

Y es que no es casual que muchos nos pidan ayuda, incluso aquellos que están muy lejos de nuestra filiación política, pero es que saben que nuestra respuesta siempre ha sido positiva, sobre todo en tiempos de crisis. Todos conocen la historia más reciente y también saben que sin miedo, Cuba, con su humildad, responde cuando otros lo necesitan.