Ataque contra embajada cubana no tiene una respuesta de Estados Unidos

La Habana, Cuba. – Parece mentira, pero es verdad. Estados Unidos acaba de colocar a Cuba en la lista de países que no cooperan en la lucha contra el terrorismo. Y lo hizo cuando precisamente es el gobierno cubano el que pide a Washington romper un sospechoso silencio e investigar el reciente ataque terrorista contra nuestra embajada.

La desvergüenza incluye la acusación de permitir la estancia de guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional de Colombia, una decisión aceptada por La Habana tras el pedido de Bogotá de ser sede de otra negociación de paz.

Recordemos que el gobierno de Iván Duque rompió ese diálogo y, en violación de lo acordado antes, quiso la extradición de los negociadores rebeldes.

Ahora Estados Unidos, que es casi un hermano carnal de Colombia, aprovecha esa circunstancia para inculpar a Cuba, que hacía cinco años estaba fuera de la maldita lista.

Víctima y victimario

Pues resulta que Cuba, que acaba de ser víctima de otro ataque terrorista, que pide investigar y aclarar, es acusada de ser un estado que no coopera en la lucha contra ese flagelo. Y la acusación viene de Estados Unidos, el mismo país que mantiene total hermetismo sobre la agresión.

Sí, por que desde hace más de dos semanas, la Administración Trump sigue sin dar señales de haberse enterado de esa embestida, que no es la primera, sino que es otra de una larga lista de ataques a nuestras embajadas y misiones en el exterior.

Este país tiene un panteón con 11 diplomáticos asesinados en distintos actos terroristas. Así que no vengan acusar a la víctima y que honren el deber de proteger a las legaciones extranjeras.

Acusar ahora a Cuba de no cooperar en la lucha contra el terrorismo es la respuesta equivocada.