Oigo a la presentadora de un espacio de televisión cuando asegura que ella está “en disposición A ayudar”, lo cual es un disparate, pues si bien es correcto decir que estamos dispuestos A ayudar, A trabajar, A estudiar, A ir y venir…, tenemos que decir que estamos en disposición DE ayudar, DE trabajar, DE estudiar, DE ir y venir… Creo que la traducción mecanizada que realizan las computadoras, más la que ejecutan aquellos traductores a los que cabe llamar tradittóre, ha abierto la talanquera a la preposición A, que anda por ahí desperdigada en boca de muchos, suelta y sin vacunar.
“Te he dicho un millón de veces que te levantes”, dice el padre con tono admonitorio, aunque solo ha regañado al hijo tres veces. La exageración es un recurso expresivo llamado Hipérbole, que con frecuencia encontramos en el habla cotidiana.