La Habana, Cuba. – La reina bruja malévola dio a la ingenua Blancanieves una manzana infectada con la Covid-19.

En la tentadora fruta hincó la joven sus dientes, y pocas horas después se le presentó la fiebre, no lograba respirar, apenas podía moverse, y en dolorosa agonía le sobrevino la muerte.

Al llegar los enanitos, uno tras otro los siete, con el evento terrible se encontraron frente a frente y abrazados al cadáver lloraron amargamente. Mientras, la bruja maléfica, en sus turbios menesteres, seguía contaminando a princesitas y duendes.

Llegó el príncipe a caballo, en corcel blanco jinete, vio siete pequeñas tumbas y una más sobresaliente, imaginó en un instante lo ocurrido en ese ambiente, se acomodó el nasobuco y partió como un cohete.