La Habana, Cuba. – La inclusión de los saberes y las prácticas tradicionales para la elaboración y el consumo del casabe en la lista representativa del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, es un incentivo para su propio desarrollo.
En un panel sobre el tema, Sonia Virgen Pérez Mojena, presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, y Anne Lemaistre, directora de la Oficina Regional de la UNESCO, subrayaron que la declaratoria fue posible por el trabajo conjunto de Cuba, República Dominicana, Haití, Honduras y Venezuela.
Expusieron cuánto de aprendizaje aportó la preparación del expediente para la candidatura multinacional, pues cada país tiene sus especificidades.
Estimular en Cuba la producción de casabe, organizar un festival internacional y fomentar los talleres con escolares son algunas de las acciones que buscan su preservación y evolución.