A los ingenieros alemanes Gottlieb Daimler y Wilhem Maybach se debe la creación de la primera motocicleta con motor de combustión interna, la Daimler reitwagen, invento significativo en la historia del transporte.
Patentada el 29 de agosto de 1885, la integraban un cuadro de madera, un motor de cuatro tiempos sobre bloques de goma, y cuatro ruedas de madera con rodadura de hierro: dos principales y dos laterales para la estabilidad; alcanzaba velocidad máxima de 11 kilómetros por hora.
Aún se discute la identidad del primer conductor del llamado vehículo montable: unos atribuyen la iniciativa al mismo Daimler y otros a Paul, su hijo.
El diseño de motocicleta no fue práctico para uso cotidiano y no se comercializó, pero sentó las bases para el desarrollo de las motos y el avance de los motores de combustión interna.
En moto por la historia
La historia de las motocicletas inicia en 1867, cuando en Spingfiled y durante la guerra civil norteamericana, Sylvester Howard Roper ideó un motor de vapor con dos pistones cada uno, accionados por carbón.
Por tanto, los padres de este artefacto bien pueden ser Roper, Gottlieb Daimler y Wilhem Maybach, cada quien con sus méritos y aportaciones, aunque ninguno de los dos modelos pudo comercializarse.
No fue hasta 1894 que los ingenieros Heinrich y Wilhelm Hildebrand fabricaron la primera motocicleta en serie del mundo, pensada para la comercialización y que se mantuvo en el mercado por tres años.
Otras innovaciones llegaron después, como el scooter, el sidecar y la moto custom, hasta llegar a motores más potentes, marcas insignias y también de acceso popular, todo conformando el amplio registro actual.