Holguín, Cuba. – Unos 10 mil cubanos en riesgo de padecer Ataxia Espino Cerebelosa Tipo 2, la mayoría en territorio nororiental, carecen de diagnóstico por falta de la tecnología para estudios genéticos conclusivos.

Con la mayor prevalencia mundial en el país, la enfermedad degenerativa del sistema nervioso central está identificada en más de 800 pacientes, que reciben seguimiento en el Centro para la Investigación y Rehabilitación de las Ataxias Hereditarias, creado en Holguín hace dos décadas.

La directora del centro, Jaqueline Medrano, ha denunciado la imposibilidad de adquirir un secuenciador de genes, imprescindible para el diagnóstico temprano de la dolencia en descendientes de los enfermos.

Pese al esfuerzo del país para el cuidado de pacientes atáxicos y sus familiares, el bloqueo de Estados Unidos impide importar a Cuba el equipamiento médico necesario.