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Camagüey, Cuba. – Una representación del pueblo camagüeyano y de toda Cuba reafirmó este jueves el compromiso de honrar el legado del Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz, quien a 150 años de su caída en combate continúa inspirando a la nueva generación.

Así se ratificó durante el acto nacional conmemorativo realizado en el sitio histórico Potrero de Jimaguayú, lugar donde el héroe perdiera la vida, hecho que se evocó con la presencia de Félix Duarte Ortega, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y las máximas autoridades provinciales.

Según valoró Duarte Ortega en la batalla actual por la recuperación económica del país en medio de las adversidades impuestas por el bloqueo económico de Estados Unidos, Agramonte constituye un ejemplo a seguir.

Durante el tributo a El Mayor se hizo entrega de los carnets del Partido y de la Unión de Jóvenes Comunistas a un grupo de nuevos militantes como expresión de continuidad.

Con la vergüenza de Agramonte

El miembro del Comité Central del Partido y primer secretario en la provincia de Camagüey, Federico Hernández Hernández, significó las altas cualidades morales y las convicciones de Ignacio Agramonte y Loynaz.

Al pronunciar las palabras centrales en el Potrero de Jimaguayú, durante el acto nacional conmemorativo del siglo y medio de la muerte de El Mayor, Hernández resaltó su disciplina, los aciertos como estratega militar, y el amor por su esposa Amalia y sus hijos.

Enfatizó que en momentos difíciles como los que hoy vive el país más que nunca debemos recurrir a Agramonte con la certeza de que para lograr más y mejores resultados contamos con la vergüenza de los cubanos.

Como parte del homenaje se recrearon simbólicos pasajes de la vida del patriota, y se distinguió la labor de un grupo de instituciones que contribuyen a promover y preservar la impronta del ilustre camagüeyano.