Moscú. – Rusia toma más distancia de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, y ratifica que no hay nada que las vincule, sobre todo tras el énfasis del bloque militar de que Moscú y Beijing son amenazas.

Serguei Lavrov, después de reunirse con su homóloga noruega Anniken Huitfeldt, precisó que la OTAN no es amiga de Rusia, incluso ellos decidieron no ser nuestros amigos al describir a Rusia y China como una amenaza para la organización.

Antes, el canciller ruso había alertado de que Moscú suspendería su misión permanente ante la Alianza Atlántica, a partir del primero de noviembre, como respuesta a la reducción del número de empleados de la misión permanente de Rusia en el bloque.

En los últimos años, los lazos entre Moscú y la Alianza Atlántica han experimentado un deterioro a niveles nunca vistos desde el fin de la Guerra Fría debido a que ambas partes se acusan mutuamente de llevar a cabo actos hostiles.