Cada vez mayores amenazas ponen en peligro a los trabajadores humanitarios de la ONU, y el secretario general de esa organización, António Guterres, hace un llamado a respetar la vida de esas personas.
En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, el titular alerta sobre cómo más atentados terroristas cobran la vida de civiles y van dirigidos también con frecuencia al personal de la ONU y otras organizaciones.
Según alertó el secretario general adjunto de asuntos humanitarios de la ONU y coordinador de ayuda de emergencia, Mark Lowcock, el año pasado murieron 139 trabajadores humanitarios, 112 heridos y 62 fueron secuestrados en el cumplimiento de su deber.
Esto marca el quinto año consecutivo en el que más de 100 trabajadores humanitarios perdieron la vida, y es la cifra anual de muertos más alta registrada 2013, precisó.