Al Gobierno mexicano le preocupa que se produzca un incidente en la frontera con Estados Unidos en el que resulten dañados migrantes centroamericanos, dijo el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete.

El alto funcionario federal alertó del peligro para los indocumentados que intentan pasar a Estados Unidos, cuyo Gobierno incluso desplegó militares en las regiones fronterizas; por ello, los exhortó a no cruzar la línea divisoria y regularizar su estancia en México, si así lo desean.

Dijo que mientras varios miles de centroamericanos marchan hacia el norte, 2600 optaron por permanecer en México y solicitar refugio; se anunció, también, una operación de ferias de empleo para ofrecer plazas formales a los migrantes con seguridad social.

Además, en Tijuana, Baja California, se estableció un grupo gubernamental para habilitar albergues y una zona de seguridad humanitaria, con servicios de salud.