Madrid, España. – La lava del volcán canario Cumbre Vieja transforma drásticamente el ecosistema en la isla de La Palma, donde la geografía cambió sustancialmente.

Un amplio grupo científico estudia el avance del magma en forma paralela a la colada principal y se dirige al mar, donde ya ha creado un delta de más de 27 hectáreas.

Las erupciones del volcán, que comenzaron el domingo 19 de septiembre, llevaron a un desplazamiento de lava expulsada que ya ha ganado al mar 367 hectáreas, según estimados realizados.

El monto inicial de ayudas, sancionado por el Consejo de Ministros, de 10, 5 millones de euros, fue considerado insuficiente, aunque el presidente, Pedro Sánchez, recordó que el Ejecutivo declaró a La Palma zona catastrófica y trabaja con el Gobierno canario para seguir en esa línea de colaboración.