Washington, EE.UU. – Al menos 121 mil empleados federales fueron despedidos o suspendidos hasta desde que el presidente Donald Trump asumió su segundo mandato el pasado 20 de enero, cunado inició un grupo de recortes en el presupuesto y las plantillas gubernamentales.

Es una cifra considerable que no incluye a quienes fueron puestos en licencia administrativa ni a quienes se acogieron a indemnizaciones voluntarias, según los análisis.

Los expertos señalaron que las consecuencias de estos drásticos recortes ya tuvieron un efecto dominó en todo el país, lo que plantea dudas sobre la capacidad del gobierno para satisfacer las necesidades públicas en materia de educación, atención médica, transporte y seguridad pública.

Asimismo, una reciente encuesta arrojó que más de la mitad de los adultos estadounidenses prevén que los recortes a los programas federales aplicados perjudiquen a sus familias y a la economía del país norteamericano, algo que está provocando una caída en la aprobación de la gestión de Trump.