Washington, EE.UU. – En una acción sin precedente y con muy negativo impacto para el proceso de enseñanza, el presidente de Estados Unidos emitió un decreto que desmantela el Departamento de Educación, retirando fondos y recursos para el sistema educativo auspiciado por el Gobierno Federal.
Al justificar la medida, el republicano dijo que busca evitar el despilfarro de fondos dado los bajos resultados académicos, indicando que el setenta por ciento de los alumnos de octavo grado no son capaces de realizar una lectura y encontrar soluciones matemáticas, lo que coloca a Estados Unidos en la parte baja de esos indicadores a nivel mundial.
Desde su llegada al cargo, Linda McMahon, la secretaria de Educación despidió a más de mil empleados y redujo de manera significativa los recursos, con un presupuesto para 2025 de 102 000 millones de dólares, que representan apenas el 1 por ciento del presupuesto federal de Estados Unidos lo que evidencia el desinterés de la administración Trump por la enseñanza.
Desde su llegada a la Casa Blanca el mandatario republicano había prometido desmantelar el sistema educacional público, algo que pone en riesgo el desarrollo futuro de la nación.