París. – Francia vive días de mucha tensión, marcados por ataques terroristas y el avance de la Covid-19, que condujeron al gobierno a la adopción de medidas.

A la situación sanitaria vigente desde hace meses ante la pandemia se sumó el jueves la urgencia por atentado, el máximo nivel de alerta en el país, activado tras el asesinato con cuchillo detres personas en la basílica de Notre-Dame, donde la policía detuvo al autor, un extremista tunecino de 21 años.

La publicación por segunda vez de caricaturas del profeta Mahoma en el semanario satírico Charlie Hebdo devolvió a nivel nacional e internacional la polémica en torno a las libertades de expresión y de prensa.

El país recibió mensajes de solidaridad de todo el mundo, sin que cesen los llamados de musulmanes a boicotear productos franceses en rechazo a las caricaturas sobre Mahoma y su defensa por París con el argumento de la libertad de expresión.