Centrada en la profundización del proceso económico que le aseguró grandes logros en lo nacional y la convirtió en la segunda potencia mundial, China festeja el sexagésimo noveno aniversario de su proclamación como República Popular.

Este nuevo aniversario coincide con ajustes estructurales para adecuar la estrategia del país a los cambios que sobrevendrán, al reemplazar el modelo de rápido desarrollo vigente por otro donde prime la alta calidad, el cuidado del entorno y el aumento del nivel de vida de la población.

Es por ello que se eliminan barreras a la importación y venta de artículos importados y se amplía el acceso a la participación extranjera, con garantías de un entorno favorable en condiciones justas y equitativas.

El primer ministro chino, Li Keqiang, aseguró en el banquete tradicional por la efeméride que el Gobierno continuará elevando el bienestar social, el nivel del sistema educativo y las pensiones.