Las afectaciones al deporte crecen exponencialmente como consecuencia del  Bloqueo Económico, Comercial y Financiero que Estados Unidos mantiene sobre Cuba desde la década de los años 60 del pasado siglo.

Martha Lidia Ruiz, directora de Relaciones Internacionales del Inder, y Manuel Trobajo, de Aseguramiento, confirman los daños que ocasiona la política del gobierno de Estados Unidos sobre atletas, entrenadores, federativos y el pueblo en general.

Trobajo consideró llenas de obstáculos de todo tipo las negociaciones que se hacen para adquirir el avituallamiento deportivo, pues todo aquello que tenga componente estadounidense es vedado para Cuba.

Los atletas no pueden realizar bases de entrenamientos y topes en Estados Unidos, donde existen una alta calidad deportiva y se abaratan los costos, deben viajar a Europa o Asia lo que aumenta los gastos en boletos aéreos y otros.

Cada vez más daños

El deporte cubano vio disminuida su capacidad de importar implementos de marcas estadounidenses, muchos de ellos de uso obligatorio, según lo estipulado en los reglamentos oficiales de las federaciones internacionales.

Para adquirir artículos de las marcas Louisville, Wilson, Xbat, Rawlings, Easton y otras, se debió acudir a terceros países, erogando alrededor de un 20 a un 30 por ciento por encima del precio de los productos, a lo que se suma el incremento en el costo de los fletes.

Para obtener los spikes de la Serie Nacional de Béisbol se solicitaron marcas estadounidenses como Rawling, Lousville, entre otras, pero el proceso se vio enlentecido por los múltiples obstáculos que impuso el bloqueo económico a Cuba.

La contratación debió hacerse por un tercer país; si se hubiera podido acceder directamente al mercado de Estados Unidos, se hubieran ahorrado más de 10 mil dólares.