Personaje que representa a tantas mujeres que antepusieron las necesidades y deseos ajenos a los propios, pero que un día toman conciencia de esa realidad y cambian su vida, es la historia que el director catalán Josep María Coll propone en el Café Teatro Bertolt Brecht.

Mi querida Shirley, adaptación del monólogo Shirley Valentine del autor británico Willy Russel, presenta a través del humor los avatares de una ama de casa y su infelicidad después de años de casada. Tras las indecisiones de cambiar en aras de una nueva vida, Shirley planea un viaje en secreto con su amiga Joanna, que la cambia para siempre.

Autoestima, sueños, decisiones y conflictos familiares son algunos de los temas de esta pieza teatral que mantiene en vilo a los espectadores, atentos hasta el desenlace final.

Siempre Shirley

Las exclamaciones y risas del público muestran a las claras lo impactante de la obra Mi querida Shirley. Bajo la dirección de Josep María Coll, se muestra la excepcional actuación de la actriz Loreta Estevez, quien con gran maestría y naturalidad desarmante encarna a la mujer en proceso de transfiguración, mientras NO deja de hacer su faena diaria.

La gran actriz con excelente interpretación se transfigura en varios personajes, a los que acabamos viendo como si estuvieran allí.

Muy realista y original la escenografía que sitúa al auditorio en el ambiente cotidiano de Shirley, quien poco a poco nos cuenta de sus peripecias existenciales, sexuales y familiares, teniendo la pared de la cocina como su principal confidente, que no habla, pero que sí la escucha.

El vestuario acorde a la evolución del personaje, nos muestra como la actriz va transformándose a medida que avanza la obra y va tomando las riendas de su destino.

La obra teatral estará a lo largo de todo el mes de diciembre, le sugerimos a todos los amantes del teatro que vean las complejidades de Shirley, quien emprende un viaje en busca de su verdadera identidad, porque más de una mujer en el público se sentirá identificada con la cotidianidad, más de una saldrá del teatro con un nuevo nombre, querrán llamarse: Shirley.