La Habana, Cuba. – Apenas unos días después de la muerte de Enrique Pineda Barnet, el cine cubano vuelve a ensombrecerse.

En lo adelante habrá que hablar en pasado de otro de sus puntales: Juan Carlos Tabío, quien hizo una dupla inolvidable con Tomás Gutiérrez Alea en los filmes Fresa y Chocolate y Guantanamera, pero también anduvo por sí mismo, con pasos firmes, como guionista y realizador.

Se hizo conocido con la comedia Se Permuta, y en ese género se sintió a sus anchas, al incorporarle a veces algún que otro toque de drama, humor negro o surrealismo. Con gracejo, ironía y agudeza retrató a los cubanos en tiempos difíciles. Nos deja películas como Plaff, Lista de espera, El cuerno de la abundancia.

Juan Carlos Tabío iba en camino de ser diplomático…pero cambió a tiempo ese rumbo. Hacer cine sería su destino. Y fue de los grandes en nuestro país.