Matanzas, Cuba.- El 6 de abril de 1863 abrió el Teatro Sauto de Matanzas, uno de los tres coliseos clásicos de Cuba y Monumento Nacional, un símbolo de la cultura para celebrarle su existencia.
Al arquitecto italiano Diego Dell Aglio se debe su construcción con capacidad para albergar a 775 espectadores y un escenario redondo que al elevarse convierte en salón de baile el auditorio.
Tras los beneficios de su proceso de restauración el Teatro Sauto de Matanzas acogió sucesos trascendentes de la vida cultural y política de la provincia y en sus predios se presentaron prominentes figuras del arte.
A 162 años de su nacimiento el coliseo se yergue como el guardián de la Plaza de la Vigía, sitio fundacional de la urbe de ríos y puentes, glamoroso estandarte de la cultura de la nación cubana.