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La Habana, Cuba. – Los dos últimos fines de semana del mes de septiembre dieron la oportunidad de disfrutar al Teatro Lírico Nacional de Cuba representando la zarzuela La leyenda del beso. El género lírico es uno de los grandes ausentes de la escena cubana, por lo que se agradece el esfuerzo de la compañía y del Teatro Nacional de Cuba. No haré una valoración técnica o artística de las funciones, pues no posee conocimientos para ellos, solo hablaré como espectador.

Considero muy positivo el esfuerzo realizado por el Teatro Lírico, su unidad docente, el Ballet Español de Cuba, la Gran Orquesta del Gran Teatro de La Habana y el Teatro Nacional, sobre todo en los momentos que corren, para brindar a la población capitalina un oasis de buen gusto y refrescar la escena citadina.

La zarzuela es una forma de música teatral o género musical escénico surgido en España que se distingue principalmente por contener partes instrumentales, partes vocales (solos, dúos, coros y otros) y partes habladas, aunque existen excepciones en las que esas últimas, las partes habladas, están completamente ausentes. El término “zarzuela”, aplicado al género musical y teatral, procede del Palacio de la Zarzuela, palacio real español situado en las proximidades de Madrid y en el que se hallaba el teatro que albergó las primeras representaciones del género.

La zarzuela “La leyenda del beso” se estrenó en el teatro Apolo de Valencia en 1923 y en Cuba en el teatro Martí el 8 de agosto de 1924. La leyenda.. es una de las zarzuelas españolas más populares en la América Hispana y esa popularidad radica en la música inspirada en elementos del folklore gitano, el ambiente escénico lleno de colorido y brillantez. Apenas nueve meses después de su estreno mundial, se estrena en Cuba

Ojalá representaciones como esta se repitan con mayor frecuencia, el Público lo agradecerá. Si muchas instituciones cooperan entre sí de seguro se puede hacer. Solo queda poner manos a la obra entre todos, ahí está el reto, asumámoslo.

Ah, recuerden, si me ven, por ahí, me saludan.

Video: Carlos del Porto