La Habana, Cuba. – A la Compañía Nacional de Danza de España le corresponderá esta noche -con la última de sus tres funciones en la sala Avellaneda del Teatro Nacional- llevarse los aplausos finales del Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso.
Carmen, ese personaje rebelde y sensual creado por el escritor francés Prósper Merimeé e inmortalizado en la danza, la ópera y el cine, llega por primera vez a Cuba en la versión coreográfica del sueco Johan Inger, con una puesta en escena sugerente, sin estereotipos.
La compañía española es dirigida por el estelar bailarín Joaquín de Luz, uno de los protagonistas del ciclo de Giselle presentado en el festival, y que mañana será distinguido en la UNEAC con el Premio Internacional Honorífico de Danza Josefina Méndez.
Hoy culmina una fiesta de la danza que fue posible por la conjunción de muchas voluntades para reunir talento y arte de excelencia.