La Habana, Cuba. – Con el aislamiento social para evitar el contagio del nuevo coronavirus nuestras rutinas de trabajo, escuela y hogar cambiaron, lo cual es difícil para todos y establecer nuevas prácticas puede ayudar, como por ejemplo, una rutina diaria flexible pero constante, que contemple actividades en la que participe toda la familia pero que también tenga espacio para tiempo libre.

Esto puede contribuir a que los hijos se sientan más seguros y mejorar su comportamiento.

Todos pueden cooperar, por ejemplo, en definir en qué horarios van a repasar los contenidos, ya sean los orientados por el televisor para los niños que no han podido reiniciar el curso, o los que reciben en las escuelas quienes sí han asistido.

Incluye ejercicios físicos todos los días, eso ayudará aliviar el estrés y con los pequeños con mucha energía en casa.

De ti depende la salud de tus hijos

Recuerda que eres un modelo para el comportamiento de tus hijos. Si practicas mantener distancias seguras, higiene personal, autorresponsabilidad y eres compasivo, especialmente con aquellos que están enfermos o vulnerables, tus hijos aprenderán de ti.

Aunque en los medios de comunicación se llama diariamente a mantener las medidas de bioseguridad, explica a tus hijos sobre las medidas que has tomado para mantener a todos a salvo y del peligro que representa contagiarse con el Sars-Cov-2.

Haz que el lavado de las manos sea divertido, incluso agrega acciones como inventar una canción.

En las rutinas diarias que definan pueden incluir escribir cartas o hacer dibujos para compartir con los amigos por las redes sociales, o con los convalecientes de la enfermedad que vivan cerca; eso hará de ellos, mejores seres humanos.