Artemisa, Cuba. – San Antonio de los Baños tejió su historia sobre las aguas del Río Ariguanabo, antes de su fecha fundacional, cuando en 1760 de sus tierras salía la madera que utilizaban comerciantes españoles para construir sus barcos.

El afluente, incluido en el área Paisaje Natural Protegido Valle del Ariguanabo, nació de sus propios manantiales y se desplaza de norte a sur, con travesía por el centro urbano del pueblo, buscando complicidad de los moradores de la villa.

Muchas de las canciones de Silvio Rodríguez lo atrapan en esa niñez feliz que vivió en las márgenes del río, a donde siempre regresa, de alguna manera, ahora como miembro de la Fundación Ariguanabo.

Menciona el cantautor la necesidad de inculcar el cuidado por el medio ambiente desde edades tempranas, porque los niños deben saber que las plantas son seres vivos que se alimentan con sol, agua y cuidados.

Trabajar para el futuro

Al amparo de las autoridades del Partido y el Gobierno de Artemisa, en el Paisaje Natural Protegido Valle del Ariguanabo, se intencionan proyectos para recuperar el entorno.

No esperemos una tarea fácil porque lo que se planea es inmenso, pero el futuro se sueña así, a lo grande, o no se sueña, comenta Ricardo Concepción, gobernador provincial. 

El Río Ariguanabo, incluido en el Paisaje Natural Protegido, ha regalado a los habitantes de San Antonio de los Baños más que bienestar económico, identidad y cultura; su rescate es prioritario aunque para lograrlo se utilice, incluso, el marco legal.

Como recalcan directivos de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente en Artemisa reunirse con los vecinos, hablar, crear condiciones para recoger o reciclar la basura, es también una manera de proteger el medio ambiente y trabajar para el futuro.