En Cuba, la inversión extranjera constituye factor activo y fundamental para el desarrollo y crecimiento económico. No podía ser diferente entonces su inclusión en el Proyecto de Constitución de la República, documento que por estos días es objeto de la consulta del pueblo, y del cual saldrá una nueva Carta Magna más atemperada a la Cuba de hoy y la que proyectamos para el futuro.

En su artículo 28, del Título Fundamentos Económicos, el documento refiere que el Estado promueve y brinda garantías a la inversión extranjera, como elemento importante para el desarrollo económico del país, sobre la base de la protección y el uso racional de los recursos humanos y naturales, así como del respeto a la soberanía e independencia nacionales.

Añade que la ley establece lo relativo al desarrollo de la inversión extranjera en el territorio nacional.

Múltiples razones para asistir, participar, opinar…

A tono con lo suscrito en la Conceptualización del Modelo Económico y los Lineamientos, el Proyecto de Carta Magna delinea una sociedad más justa, soberana, socialista, democrática, próspera y sostenible.

En el caso de la inversión extranjera existe también una coherencia estratégica, pues Cuba demanda de capital comprometido anualmente para que crezca el Producto Interno Bruto y lograr así el desarrollo.

Ejecutar inversiones y alcanzar una estabilidad en el sector, si bien resulta un proceso paulatino, no significa que no sea, además, un imperativo. Que esté contemplada su importancia en la propuesta de ley de leyes constituye una garantía y reflejo fiel de las líneas de continuidad de un país.

Otra razón más para asistir, participar, opinar… en la consulta popular que hoy vivimos los cubanos.