Belgrado, Serbia. – Desde la semana pasada, Serbia está sacudida por protestas masivas provocadas por el rechazo de la oposición a aceptar su derrota en las recientes elecciones parlamentarias.

El 24 de diciembre, los partidarios de una alianza de partidos de la oposición intentaron asaltar la administración municipal de la capital, Belgrado, lo que ha dejado un tenso panorama de violencia y desobediencia colectiva.

En medio de estos acontecimientos, las autoridades del país europeo sospechan que las protestas cuentan con el apoyo de Occidente, que intenta influir en la situación política de Serbia y llevar a cabo una revolución de colores, similar a realizada en 2014 en Ucrania.

Este lunes la oposición partidaria de Occidente bloqueó la entrada al Ministerio de Administración Estatal y Autonomía Local, mientras 8 policías resultaron heridos y 38 personas fueron detenidas en las protestas conta el presidente Aleksandar Vucic.