El lunes 13 de agosto de 2018 comenzará en Cuba la consulta popular sobre el proyecto de nueva Carta Magna de Cuba, texto que eleva al rango constitucional principios de política exterior defendidos durante décadas por la Revolución.

El documento dedica un capítulo a las relaciones internacionales, en el que precisa que la República basa la política exterior en el ejercicio de su soberanía y los principios antiimperialistas e internacionalistas.

En ese sentido, el secretario del Consejo de Estado, Homero Acosta, señaló que la mayoría de las constituciones no recogen ese tema de manera particular.

Según el proyecto, Cuba ratifica su aspiración de paz digna y verdadera para todos los Estados, el derecho a la libre determinación, el respeto al Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas, y la voluntad de integración y colaboración con los países de América Latina y el Caribe.

El respeto como vía para asegurar la convivencia pacífica

El Proyecto de Constitución amplía la cuestión de la libre determinación destacando la libertad de los pueblos de elegir su sistema político, económico, social y cultural.

Asimismo, defiende la amistad entre los países y rechaza la violación del derecho irrenunciable y soberano de todo Estado a regular el uso y los beneficios de las telecomunicaciones en su territorio.

Entre las novedades del proyecto aprobado el 22 de julio en la Asamblea Nacional del Poder Popular, están la condena al terrorismo, la protección de los derechos humanos, el repudio al fascismo, la promoción a la multipolaridad, y el llamado a construir sociedades de la información y el conocimiento centradas en las personas.