La Habana, Cuba.- El 9 de enero es una fecha recordada con tristeza en la historia de la Revolución cubana; y es que hace ya 25 años un grupo criminal tratando de alcanzar el sueño americano asesinaron a varios jóvenes en la garita de Tarará.

La agrupación pretendía salir ilegalmente del país con la esperanza de acogerse a la Ley de Ajuste Cubano, pero no pudieron lograrlo porque todas las embarcaciones estaban desactivadas, y fue entonces que decidieron regresar a la garita para no dejar testigos.

El resultado de la acción terminó con la vida del sargento de la policía, Yuri Gómez, el guardafronteras Orosmán Dueñas, el guardia de seguridad de la base náutica de Tarará, Rafael Guevara y el sargento Rolando Pérez Quintosa.

Los combatientes del Ministerio del Interior no tardaron en ponerse al mando y con la colaboración del pueblo lograron capturar rápidamente al septeto homicida, posteriormente juzgado por los tribunales revolucionarios.